- Disponer de tiempo suficiente para comer sentados y charlar.
- Tener una conversación agradable ,comentar los sucesos del día, las experiencias de cada cual, los proyectos para el fin de semana….
- Olvidar la televisión y el teléfono
Es preciso algo de paciencia y mucha constancia para que los menores de la familia vayan adquiriendo buenos hábitos como:
- Ayudar a preparar la comida.
- Masticar despecio.
- Usar cubiertos.
- Poner la mesa y recogerla después de comer.
- Lavarse los dientes después de cada comida.
- Lavarse las manos antes de cada comida.
- Desde los 3-4 años se les puede pedir que cojan determinados productos del supermercado, explicándole que son y porque son importantes en nuestra salud.
- En cualquier ocasión se le puede enseñar a leer etiquetas y a valorar los nutrientes que van a consumir.
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